Siempre se escuchó, con cierta lógica, que el pádel masculino era más espectacular que el pádel femenino. Lo cierto es que eso puede ser verdad, lo que no quiere decir que sea mejor.
El pádel femenino profesional también es muy espectacular. Aunque realmente el físico del masculino hace que las chicas no puedan llegar a superar ciertos límites, también hay decir que el pádel femenino profesional es más real y vistoso a la hora de aprender. Los golpes técnicos y la táctica son mucho más instructivos en el pádel femenino.
Pero, además, es cierto algo que se lleva comentando desde hace tiempo: que el pádel femenino está evolucionando a pasos de gigante. Las chicas están jugando a un ritmo más alto y pegando mucho más de lo que se pegaba antes. Esto se traduce en que las gradas del World Padel Tour en los partidos de las chicas cada vez tienen más aficionados y de hecho, desde semifinales es habitual ver las gradas a tope como en los partidos de los chicos.
Son muchos los partidos del WPT femenino en el que se ven dormilonas, dejadas, remates por 3 y sus salidas fuera de la pista para recuperarlas, es decir, puntos de una complejidad y espectacularidad impresionante. Suelen ser habituales, por lo que cada vez es más atractivo para el público ver a estas cracks.
Antiguamente se “criticaba” que hacían muchos globos y pocos golpes ofensivos, pero lo cierto es que ahora esto ha cambiado, sobre todo en el Top Ten. Además las jugadoras jóvenes que vienen por detrás son mucho más agresivas y los puntos son mucho más disputados. Es decir, han aumentado los golpes definitivos, lo cual hace que los puntos, siendo largos, como también pueden serlo en el pádel masculino; sean más rápidos y sobre todo con definiciones más agresivas.
Actualmente se ven menos globos, pues las jugadoras que están enfrente ya no dudan en rematar y definir el punto ante bolas lentas o globos que no sean perfectos. Por eso, pese a una menor velocidad, inevitable; el juego femenino se ha acercado mucho y probablemente siga acercándose a los chicos.
Algo que también da especial importancia al circuito femenino es que cada vez son más las parejas que están surgiendo y pelean con las parejas Top. Como comentábamos en nuestro resumen de la pasada temporada, donde las Gemelas han reinado, las alternativas a partir de cuartos de final son muy grandes. E incluso el nivel mostrado por Carolina y Cecilia a final de temporada hacen pensar que esta próxima temporada quizás haya aún más alternativas. Además, debemos sumar las jóvenes promesas como Gemma Triay, Alba Galan o la ya realidad Marta Ortega que vienen pisando muy fuerte y dispuestas a dar alguna campanada esta temporada. Y así las pistas se ven más llenas cuando juegan las chicas.
Otra cuestión que siempre ha sido objeto de debate y que sigue siéndolo en la actualidad, es la posibilidad de implementar cambios en las normas o en la tecnología que se usa, con pelotas o palas que faciliten la velocidad de bola; con el objetivo de aumentar el atractivo del circuito femenino. La número 3 del mundo, Alejandra Salazar, es contraria a este tipo de propuestas: “Yo no lo comparto. Creo que damos espectacularidad en la medida que nuestra genética nos lo permite, no se nos puede pedir lo mismo que a un hombre, evidentemente. El pádel femenino actual gusta mucho y no creo que tengamos que usar otra pelota. Eso desvirtuaría el juego”.
Sin duda, el circuito femenino actual genera interés tal y como es: con un juego diferente al de los chicos pero totalmente compatible con él.
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